¿Qué es la epilepsia?
La epilepsia es un trastorno cerebral en el cual una persona tiene crisis epilépticas repetidas durante un tiempo. Las crisis epilépticas son episodios de actividad descontrolada y anormal de las neuronas que puede causar cambios en la atención o el comportamiento.
Causas
- Accidente cerebrovascular o accidente isquémico transitorio (AIT)
- Demencia, como el mal de Alzheimer
- Lesión cerebral traumática
- Infecciones, como absceso cerebral, meningitis, encefalitis y VIH/SIDA
- Problemas cerebrales presentes al nacer (anomalía cerebral congénita)
- Lesión cerebral que ocurre durante o cerca del momento del nacimiento
- Trastornos metabólicos presentes al nacer (como fenilcetonuria)
- Tumor cerebral
- Vasos sanguíneos anormales en el cerebro
- Otra enfermedad que dañe o destruya el tejido cerebral
Síntomas
- Ausencias típicas (pequeño mal) (episodios de ausencias)
- Convulsiones tonicoclónicas generalizadas (crisis de gran mal) (involucran todo el cuerpo e incluyen aura, rigidez muscular y pérdida de la lucidez mental)
- Convulsiones parciales (focales) (pueden incluir cualquiera de los síntomas anteriormente descritos, según la parte del cerebro donde se inicia la convulsión)
Pruebas y exámenes
- Usar un aparato de registro electroencefalográfico durante días o semanas mientras se ocupa de su vida cotidiana.
- Permanecer en un hospital especial donde se pueda grabar la actividad de su cerebro mientras cámaras de video capturan qué le pasa durante una crisis epiléptica. Esto se denomina EEG en video.
- Química sanguínea
- Glucemia
- CSC (conteo sanguíneo completo)
- Pruebas de la función renal
- Pruebas de la función hepática
- Punción lumbar (punción raquídea)
- Exámenes para enfermedades infecciosas
Grupos de apoyo
Expectativas (pronóstico)
Es probable que algunas personas con epilepsia puedan reducir o incluso suspender sus medicamentos anticonvulsivos después de no tener ninguna convulsión durante varios años. Ciertos tipos de epilepsia en la niñez desaparecen o mejoran con la edad, por lo regular a finales de la adolescencia o hacia los 20 años.
Para muchas personas, la epilepsia es una afección de por vida. En estos casos, es necesario continuar con los fármacos anticonvulsivos. Hay un riesgo muy bajo de muerte súbita con la epilepsia.