Los síntomas generalmente no se presentan sino hasta después de los 50 años, pero pueden empezar en personas más jóvenes. Las personas que padecen esta afección tienen una pérdida de la fuerza muscular y la coordinación que con el tiempo empeora y les hace imposible la realización de actividades rutinarias, como subir escaleras, levantarse de una silla o deglutir. La debilidad puede afectar primero los brazos o las piernas, o la capacidad de respirar o deglutir. A medida que la enfermedad empeora, más grupos musculares desarrollan problemas. La esclerosis lateral amiotrófica no afecta los sentidos (vista, olfato, gusto, oído y tacto). La mayoría de los pacientes es capaz de pensar como lo hace normalmente, si bien una pequeña cantidad presenta demencia, lo que provoca problemas con la memoria. Los síntomas incluyen:
- Depresión
- Dificultad para respirar
- Dificultad para deglutir (tragar): ahogarse fácilmente, babear, arcadas
- Caída de la cabeza debido a la debilidad en los músculos del cuello
- Calambres musculares
- Rigidez muscular, llamada espasticidad
- Contracciones musculares llamadas fasciculaciones
- Debilidad muscular que comienza en una parte del cuerpo, como el brazo o la mano y empeora lentamente hasta llevar a dificultad para levantar cosas, subir escaleras y caminar
- Parálisis
- Problemas en el lenguaje, como patrón de habla lento o anormal (mala articulación de las palabras)
- Cambios en la voz, ronquera
- Pérdida de peso