¿Qué es la neumonía?
Es una afección respiratoria en la cual hay una infección del pulmón.
Este artículo cubre la neumonía extrahospitalaria. Este tipo de neumonía se encuentra en personas que no hayan estado recientemente en el hospital u otro centro de atención médica, como un hogar de ancianos o un centro de rehabilitación. La neumonía que afecta a las personas en centros de atención médica, tales como hospitales, se denomina neumonía intrahospitalaria.
Causas
- Las bacterias y virus que viven en la nariz, los senos paranasales o la boca pueden propagarse a los pulmones.
- Usted puede inhalar algunos de estos microbios directamente hacia los pulmones.
- Usted inhala alimento, líquidos, vómitos o secreciones desde la boca hacia los pulmones (neumonía por aspiración).
- El tipo más común de bacteria es el Streptococcus pneumoniae (neumococo).
- La neumonía atípica, con frecuencia llamada errante, es causada por otras bacterias.
- Un hongo, denominado Pneumocystis jiroveci, puede causar neumonía en personas cuyos sistemas inmunitarios no funcionan correctamente, especialmente personas con una infección avanzada por VIH.
- Los virus, como el de la gripe también son una causa común de neumonía.
- Enfermedad pulmonar crónica (EPOC, bronquiectasia, fibrosis quística).
- Fumar cigarrillos.
- Demencia, accidente cerebrovascular, lesión cerebral, parálisis cerebral u otros trastornos cerebrales.
- Problemas del sistema inmunitario (durante un tratamiento para el cáncer o debido a VIH/SIDA o trasplante de órganos)
- Otras enfermedades graves, tales como cardiopatía, cirrosis hepática o diabetes mellitus.
- Cirugía o traumatismo reciente.
- Cirugía para tratar cáncer de la boca, la garganta o el cuello.
Síntomas
- Tos (con algunas neumonías usted puede expectorar una mucosidad amarillenta o verdosa o incluso moco con sangre).
- Fiebre que puede ser baja o alta.
- Escalofríos con temblores.
- Dificultad para respirar (puede únicamente ocurrir cuando sube escaleras o se esfuerza).
- Confusión, especialmente en las personas de mayor edad.
- Sudoración excesiva y piel pegajosa.
- Dolor de cabeza.
- Inapetencia, baja energía y fatiga.
- Malestar (no sentirse bien).
- Dolor torácico agudo o punzante que empeora cuando usted respira profundamente o tose.
- Síndrome de la uña blanca o leuconiquia.
Pruebas y exámenes
- Gasometría arterial para ver si está llegando suficiente oxígeno a la sangre desde los pulmones.
- Hemocultivo y cultivo de esputo para buscar microbios que pueden estar causando la neumonía.
- Conteo sanguíneo completo para verificar el conteo de glóbulos blancos.
- Tomografía computarizada del tórax.
- Broncoscopia: una sonda flexible con una cámara iluminada en su extremo que se baja por los pulmones.
- Toracocentesis: extraer líquido del espacio entre el revestimiento externo de los pulmones y la pared torácica.
Expectativas (pronóstico)
Con tratamiento, la mayoría de los pacientes mejora al cabo de dos semanas. Los pacientes de edad avanzada o muy enfermos pueden necesitar tratamiento por más tiempo.
Las personas que tienen mayor probabilidad de tener neumonía complicada incluyen:
- Adultos mayores
- Personas cuyo sistema inmunitario no funciona bien
- Personas con otros problemas de salud serios, como diabetes o cirrosis del hígado
En todas las afecciones mencionadas antes, la neumonía puede llevar a la muerte si es grave.
En casos raros, se pueden desarrollar problemas más graves, como:
- Cambios potencialmente mortales en los pulmones, que requieren un respirador
- Líquido alrededor del pulmón (derrame pleural)
- Líquido infectado alrededor del pulmón (empiema)
- Abscesos pulmonares
El médico puede ordenar otra radiografía para asegurarse de que los pulmones estén despejados. Sin embargo, pueden pasar muchas semanas hasta que las radiografías se aclaren. Usted probablemente se sentirá mejor antes de que la radiografía se aclare.