Unidad de ictus criptogénico

El ictus es un trastorno repentino de la circulación sanguínea cerebral que puede alterar, de  manera temporal o definitiva, las funciones del cerebro. Existen 3 tipos de ictus, siendo el más importante:

• Isquémico: se produce por una interrupción del ritmo normal de la circulación sanguínea debido a un trombo o un émbolo. Este tipo es el más frecuente y representa el 82% del total. Dentro de este tipo se encuentra el ictus criptogénico o de causa desconocida.

La fibrilación auricular es una arritmia cardíaca caracterizada por un ritmo auricular rápido e irregular. Es la arritmia más frecuente (1-2% de la población y 10% en personas de más de 80 años). La clínica es muy diversa pudiendo producir palpitaciones, disnea (fatiga), dolor torácico. Pero muchas veces es asintomática (se estima que alrededor del 21% de los casos son asintomáticos). La consecuencia más grave de fibrilación auricular es la presencia de ictus, siendo además los ictus más graves y que producen mayor incapacidad.

Tratada de forma correcta (anticoagulantes) se minimiza en gran medida la posibilidad de ictus asociado a fibrilación auricular.

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