Preparación previa / Pruebas preoperatorias
La preparación del paciente es muy similar a la de un cateterismo cardíaco. El paciente deberá estar en ayunas ese día. Antes de la angioplastia se le explicará el procedimiento, se firmarán los consentimientos informados y se hablará con sus familiares. Se le administrará un tranquilizante y se rasurarán las zonas que se van a puncionar (la ingle y la muñeca). El paciente debe tomar su medicación habitual ese mismo día, excepto en el caso de los anticoagulantes, que deberán ser retirados 3 días antes del cateterismo.
Recuperación
Una vez realizado el procedimiento se realizará “hemostasia” del punto de punción (control del sangrado). En el caso de la arteria femoral se utilizan dispositivos de cierre del vaso con un punto, y en el caso de la arteria radial se coloca una pulsera de compresión durante 2-3 horas. Tras una angioplastia el paciente debe permanecer en cama un mínimo de 2 horas, y el alta hospitalaria se suele dar en 24-48 horas. Al alta se debe administrar al paciente medicación específica (“antiagregantes”) para evitar la oclusión brusca de los stents, que deberá mantener un mínimo de un mes y un máximo de un año.
Beneficios y riesgos
El principal beneficio del intervencionismo en las arterias coronarias enfermas es el reestablecimiento del flujo sanguíneo, lo que alivia los síntomas de angina de pecho y evita su obstrucción completa (el infarto agudo de miocardio).
Los riesgos de una angioplastia son similares a los de un cateterismo cardíaco e incluyen:
- Palpitaciones y dolor torácico transitorio al implantar los stents. Las inyecciones de contraste pueden producir una sensación pasajera y tolerable de calor. Tras el procedimiento puede notar molestias locales en el tórax que desaparecen en pocas horas.
Las complicaciones menores aparecen en una de cada 100 angioplastias. Las más frecuente son los hematomas en la zona puncionada y desaparecen espontáneamente en pocos días. Al utilizar radiaciones ionizantes (rayos X), se debe tener especial cuidado en mujeres embarazadas.
Las complicaciones cardíacas graves aparecen en una de cada 1000 angioplastias, e incluyen arritmias graves, infarto de miocardio, perforaciones de las arterias coronarias y derrame pericárdico. El riesgo de muerte es menor del 0.5%. Otras complicaciones excepcionales son las reacciones alérgicas al contraste, el empeoramiento de la función renal o las complicaciones vasculares en el vaso puncionado. Estas últimas pueden requerir cirugía vascular para su resolución.
En general el beneficio de una angioplastia coronaria supera ampliamente el riesgo de complicaciones, y en el caso de aparecer éstas, el personal encargado del procedimiento está sobradamente capacitado para su manejo y resolución.