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Inseminación Artificial casera: ¿es legal comprar semen a domicilio y quedarse embarazada desde casa?

7 julio, 2016 Maternidad y ginecología

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Hace algunos meses que el concepto de inseminación artificial casera es objeto de debate y protagonista de los medios de comunicación. No es un proceso novedoso ni reciente en nuestro país, de hecho alrededor de unos 1.000 niños han nacido a través de este método en España y unos 45.000 en todo el mundo.

Sin embargo, el programa televisivo de Cuatro ‘9 meses con Samanta’ ha sacado a la palestra el tema de la inseminación casera y ha reavivado el debate al respecto. En el programa, la presentadora Samanta Villar hacía un seguimiento de su propio embarazo conseguido a través de Reproducción Asistida y analizaba la maternidad desde distintos puntos de vista, incluyendo el caso de una pareja de mujeres que recurrían a la compra de semen a domicilio para inseminarse en casa y poder así ser madres.

La efectividad y el riesgo de realizar esta técnica de inseminación artificial en casa sin supervisión profesional es cuestionada por los profesionales de Reproducción Asistida.

No existen estudios que ayuden a concluir las tasas de éxito de la Inseminación Artificial casera, su efectividad se compara con la de las relaciones sexuales sin protección, pero teniendo en cuenta que el esperma es transportado e inseminado días después de su eyaculación, lo más probable es que sea algo menor.

 

¿En qué cosiste la inseminación artificial casera?

Una Inseminación Artificial casera es una inseminación que se realiza la propia mujer o su pareja sin necesidad de acudir a ninguna clínica de reproducción asistida, llevada a cabo desde casa con una jeringuilla y el semen de un donante, que normalmente se compra por internet y se recibe en el domicilio congelado en nitrógeno líquido.

El procedimiento consiste en inyectar el semen rebajado con suero en la vagina a través de una jeringuilla. Para ello, la mujer debe ponerse en posición horizontal con las piernas abiertas y levantadas, posición que recomiendan mantener durante aproximadamente una media hora después de realizar la inseminación. Transcurrido ese tiempo la mujer puede continuar con su vida normal.

Se recomienda que el proceso se realice durante los días fértiles de la mujer, es decir, a la mitad de su ciclo menstrual y para aumentar las posibilidades de embarazo es conveniente repetir el procedimiento entre 2 y 3 veces durante estos días fértiles.

La Inseminación Artificial casera es utilizada principalmente por mujeres que deciden ser madres solas, parejas de mujeres y mujeres cuya pareja tiene problemas de eyaculación como la disfunción eréctil o la eyaculación retrógrada.

En los casos en los que haya problemas con conseguir el embarazo no se recomienda este procedimiento porque no corrige la causa de esterilidad.

¿Qué diferencia la Inseminación Artificial casera de la Inseminación Artificial en una clínica de reproducción?

La Inseminación Artificial casera no puede considerarse una técnica médica de reproducción asistida para tratar la esterilidad ya que no utiliza métodos diagnósticos ni terapéuticos realizados por  personal cualificado.

 Aunque el procedimiento de Inseminación Artificial es muy sencillo, en  las clínicas de reproducción asistida se procede inicialmente a la estimulación ovárica con tratamientos hormonales, cuando los ovarios están preparados, se desencadena la ovulación de forma programada y a las 36 horas se coloca la muestra de semen  directamente  dentro del útero a través de una canulita fina.  Mientras que en casa, no se puede programar con exactitud la ovulación y la muestra de semen se coloca en la vagina por lo que las posibilidades de embarazo son mayores si se llevan a cabo por especialistas.

Otro aspecto que diferencia estas dos técnicas es la elección del donante de esperma. En las clínicas de reproducción asistida españolas el anonimato del donante es obligatorio por lo que no se puede escoger el donante bajo ningún concepto siendo el equipo de profesionales el que selecciona al donante según criterios puramente clínicos.

En el proceso de inseminación artificial casera el semen se compra por internet y la mujer puede elegir si optar por un donante anónimo o seleccionar un donante entre un listado en el que se incluyen características personales, físicas, historial clínico e incluso fotos de su niñez. De este modo, la mujer puede escoger un donante de esperma que tenga características físicas similares  a las suyas, que tenga un determinado nivel de estudios o incluso que hable varios idiomas.

 

¿Por qué existe un debate sobre su legalidad?

Los especialistas en reproducción asistida y la Sociedad  Española de Fertilidad  consideran que la inseminación casera es ilegal ya que según la ley, las técnicas de reproducción asistida sólo puede realizarse por centros acreditados que cumplan criterios de calidad y seguridad ; porque no existen seguros de responsabilidad para supuestos daños y porque la compra de semen por internet  permite elegir los rasgos físicos del donante, lo que es contrario a la ley. Por su parte, los defensores de esta técnica afirman que se trata de un proceso realizado en la intimidad del domicilio propio por lo que su práctica no está regulada por la ley.

Además, los especialistas consideran que la inseminación casera comporta un riesgo para la mujer ya que el material clínico no se encuentra en las condiciones óptimas para ser utilizado y el entorno en el que se practica tampoco es favorable en cuestiones de seguridad,  higiene de la inseminación y de falta de control médico.

Por otro lado, el traslado del semen y su conservación es otro aspecto polémico al respeto ya que la muestra puede deteriorarse por el paso del tiempo o las condiciones de transporte.

Los defensores de la inseminación casera, en cambio, aseguran que es un proceso mucho más íntimo y si se siguen las indicaciones recomendadas no supone ningún riesgo para la mujer.

En FIV Recoletos, recomendamos consultar cualquier decisión con un especialista para conocer las contraindicaciones exactas en cada caso concreto y evitar cualquier tipo de riesgo.

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