Los riesgos de la automedicación
20 noviembre, 2018 Prevención
¿Cuántos medicamentos tomas sin consultar con tu médico? Es posible que, como le pasa al 72 por ciento de la población, ante un dolor de cabeza o de espalda, cuando aparece la fiebre o sufres dolor de estomago acudas al botiquín antes que a tu médico de cabecera. Esta actitud puede no ser peligrosa si es ocasional pero convertirlo en un hábito puede conllevar un problema para tu salud. Por eso es conveniente saber cuándo es aceptable automedicarse y cuándo no.
No eres médico
Esta tal vez sea la razón más importante para no incurrir en la automedicación. Cada caso es un mundo y por tanto, no será la misma dosis para un tipo de gripe que para otro, por ejemplo. A pesar de que los medicamentos aportan consejos de uso en sus prospectos, son muy genéricos y por supuesto, no están preparados para solventar las sintomatologías de cada paciente. Por eso es recomendable acudir a tu médico de cabecera y que ajuste la medicación a tu problema. Esto es incluso más peligroso con medicamentos como antidepresivos o ansiolíticos, que requieren de un estricto control durante su tratamiento, y abusar de ellos contra consejo médico, o directamente por falta del mismo, pone en riesgo tu salud.
Falta de efecto
Otro posible riesgo de la automedicación, es que si se abusa en exceso de un mismo medicamento para paliar los síntomas de un resfriado o de una gripe, el cuerpo termina por hacerse inmune a estos productos. Por lo tanto, en caso de necesidad real y de tratamiento recomendado por un especialista, estos medicamentos no tendrán el efecto deseado y habrá que pasar a otro tipo de medicación quizás más intensa, pero que puede dejar más secuelas en el organismo. De hecho, el uso de algunos antibióticos termina por hacer que las bacterias de nuestro cuerpo se hagan resistentes a todo. Por no hablar de las consecuencias que de por sí dejan ya los medicamentos tomados sin control.
Efectos adversos
Muchas veces se tiene en cuenta paliar cuanto antes los síntomas de nuestra afección para poder seguir con nuestro ritmo de vida. No estamos dispuestos a descansar y recuperarnos, que sería lo recomendable, pretendiendo que nuestro cuerpo se recupere lo antes posible, y a ello contribuyen los rápidos alivios que prometen muchos medicamentos en su publicidad. Sin embargo, el éxito rápido tiene un peligroso efecto secundario, que varía dependiendo del medicamento pero que seguramente termine por dejar secuelas en el organismo. Un remedio que hasta hace relativamente poco se usaba para todo y casi indiscriminadamente, como es el Paracetamol, ha demostrado tener graves efectos secundarios por su uso prolongado y repetido. Un simple dato, los pacientes que usan repetidamente el Paracetamol tienen un 63% más de probabilidades de morir de forma inesperada.