¿Puedo ser madre tras un cáncer?
28 julio, 2015 Maternidad y ginecología
Tener hijos tras superar un cáncer que asocie riesgo de perder la función del ovario es posible, preservando la fertilidad de forma planificada. Una de las principales preocupaciones de muchas mujeres diagnosticadas de cáncer es si podrán quedarse embarazadas después de superar la enfermedad, ya que debido a los tratamientos de quimioterapia pueden perder la fertilidad.
Algunos tipos de cánceres que implican a los órganos sexuales como el cáncer de ovario, algunos tratamientos contra el cáncer que afectan a todo el cuerpo como la quimioterapia, o concretamente a la zona ovárica como la radioterapia que afecta el área pélvica o las cirugías que afecten al ovario, pueden hacer que se pierda la fertilidad de forma transitoria o permanente.
La supervivencia de los pacientes oncológicos ha mejorado mucho durante los últimos años gracias al avance de los tratamientos y de las técnicas de diagnóstico temprano. Actualmente, un porcentaje importante de pacientes consiguen una curación completa, o al menos paralizan la enfermedad durante mucho tiempo. Por ello, y especialmente en los pacientes más jóvenes, aparece la necesidad de recuperar la fertilidad una vez terminado el tratamiento, por lo que es muy importante informar a los pacientes de las opciones disponibles. Cabe destacar que se ha comprobado que conservar la fertilidad antes del tratamiento oncológico es muy importante para los pacientes y sirve de apoyo emocional positivo para luchar contra el cáncer.
Ante estos procesos oncológicos, las pacientes que quieran ser madres en el futuro pueden preservar su fertilidad mediante distintos tipos de técnicas de reproducción asistida:
– Vitrificación de ovocitos: esta es una técnica que consiste en la extracción y congelación celular avanzada de los ovocitos de la mujer, con el fin de posponer su capacidad reproductiva. Gracias a esta técnica se le da a la paciente que tiene que someterse a un tratamiento contra el cáncer la oportunidad de que pueda ser madre tras superar el tratamiento.
Para ello, previamente a la extracción de ovocitos, se realiza una estimulación del ovario con tratamiento hormonal mediante inyecciones subcutáneas. Después, se extraen los ovocitos en quirófano sin ingreso, por vía vaginal y con sedación y se criopreservan en nitrógeno líquido.
– Congelación de la corteza ovárica: se trata de una técnica que consiste en la congelación avanzada de tejidos de la corteza ovárica (la capa externa del ovario, donde están los óvulos) por laparoscopia. Se caracteriza por ser muy poco invasiva.
Esta técnica es una técnica experimental que está recomendada especialmente para los casos en los que se necesita iniciar un tratamiento contra el cáncer de manera inmediata y no da tiempo a realizar una vitrificación de ovocitos.
– Congelación de embriones: otra opción para mujeres con pareja masculina es la congelación de embriones antes del tratamiento oncológico. Para ello es necesario hacer parte de un ciclo de Fecundación In Vitro (FIV), congelar los embriones de la pareja y una vez terminado el tratamiento y cuando el oncólogo recomiende que es posible el embarazo, descongelar los embriones y realizar su transferencia al útero de la mujer.