Recoletas Red Hospitalaria ha puesto en marcha un nuevo sistema, Embryoscope (desarrollado por Vitrolife), que permite monitorizar los embriones y observar su evolución para seleccionar los mejores para su transferencia al útero materno y lograr el embarazo.
Concretamente, este moderno incubador está dotado de una cámara y un microscopio que proporciona cada 10 minutos un registro de imágenes de los óvulos fecundados. Además, con esta tecnología el embriólogo puede analizar el curso completo de su desarrollo sin necesidad de manipularlo ni sacarlo del entorno seguro de la incubadora, como había que hacer hasta ahora que debían ser valorados al menos cada 24 horas fuera del incubador.
“Con la implementación de esta tecnología, Recoletas da un paso más allá en la mejora de los resultados alcanzados en reproducción asistida, ya que proporciona un mayor conocimiento sobre el embrión. No solo podemos observar las características del mismo sino también su evolución minuto a minuto sin tener que alterar sus condiciones de cultivo, aumentando las posibilidades de conseguir con éxito un embarazo”, asegura el doctor Luis Rodríguez -Tabernero, director médico FIV Recoletas Valladolid.
Ventajas del Embryoscope
La fecundación in vitro (FIV) es una técnica de reproducción asistida que consiste en la unión en el laboratorio de uno o varios óvulos con los espermatozoides, con el fin de obtener embriones para transferir al útero. Se utiliza para tratar varios de problemas de fertilidad e implica diferentes pasos. Uno de ellos es cultivar los embriones en un entorno tranquilo y fiable y seleccionar aquel con más probabilidades de resultar en el nacimiento de un bebé sano.
Pero no todos los embriones pueden desembocar en un embarazo, ya que varían en calidad y cuanto mejor sea la calidad más probabilidad de que se implante en el útero y se consiga la gestación.
Por eso, Embryoscope consta de una herramienta de software que ofrece a los embriólogos información muy precisa y les ayuda a la hora de elegir el embrión con mayor potencial de implantación y con las mejores características para ser transferido al útero de la futura madre. Asimismo, los embriones permanecen protegidos, tranquilos en un entorno estable y cálido durante todo el cultivo.
“Gracias a las imágenes obtenidas con el uso del EmbryoScope, el embriólogo tiene la mejor información posible sobre todo el historial de desarrollo del embrión para decidir qué embrión transferir o congelar para su uso futuro”, añade el doctor Rodríguez -Tabernero
Además, a diferencia de los otros modelos de evaluación convencionales, que solo mostraban la temperatura y la concentración de CO2 en la que se desarrollaban los embriones, con EmbryoScope se tiene una información completa de la evolución y división embrionaria hasta el estadío de blastocisto, y así consigue que las tasas de gestación y de implantación sean mayores. Además, posibilita una menor pérdida del embarazo temprana y una tasa de natalidad de niños nacidos vivos mayor que con el cultivo tradicional.
Esta tecnología del EmbryoScope, ahora disponible en Recoletas, se ha utilizado en más de un millón de tratamientos de pacientes en todo el mundo desde 2009, siendo considerado el incubador de referencia, tanto por la seguridad para el embrión como para la salud de los bebés nacidos tras haber utilizado la tecnología.
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